La palabra "biblioteca" proviene del latín bibliothēca, que a su vez deriva del griego βιβλιοθήκη ('bibliothēke'), la cual está compuesta por βιβλίον ('biblíon' «libro») y θήκη ('théke' «armario, caja»). Es decir, hacía referencia al lugar donde los libros eran guardados.
Hoy en día, las bibliotecas son mucho más que un simple armario donde almacenar libros, hoy en día y sobre todo en los centros educativos, las bibliotecas disponen de muchísimos recursos para considerarla como un espacio igual de importante que el aula, pero debemos aprender a trabajar en ella.
Lo más importante para que una Biblioteca escolar funcione adecuadamente es:
- Tener recogidos todos los libros, documentos, enciclopedias, etc, con los que cuenta nuestro centro. Para ello la Junta de Andalucía lleva a cabo un programa llamado Abies.
-Una buena organización y exposición clara de los materiales con los que contamos.
-Elaborar por parte del centro un Proyecto de Lectura y Biblioteca, para integrarla en las actividades que se pueden realizar dentro del colegio.
Todo esto, más la colaboración y participación de todo el profesorado, hace de este espacio un lugar más enriquecedor para nuestro aprendizaje.